5 de agosto de 2013

1937 accidente entre CTFV y Central de Aragón

Los accidentes, por muy graves que sean, con el tiempo se olvidan, y lo mas importante no es que se olviden las causas y la aplicación de los posibles remedios, es que se olvida que en el tren viajan personas, personas que no son dueños de su destino, el cual se rige por una concatenación de circunstancias que les son ajenas. Os incluyo este articulo que me ha remitido Javier Golf, al cual agradezco que de vez en cuando, nos ocupemos de las personas.



El día 4 de Diciembre de 1937 el tren correo del Central de Aragón, formado por diez coches y furgones y arrastrado por la Couillet 030 nº 7, circulaba con 27 minutos de retraso. Debía haber llegado a Valencia a las 13:30 horas, cuando a las 13.55 se aproxima al cruce con la CTFV en la Carrasca. Al atravesar dicho cruce, un tren eléctrico de CTFV que circulaba con cuatro minutos de retraso y que había salido de Valencia a las 13:45 en dirección al Grao, compuesto por coche motor y un coche remolque, choca con el tender de dos ejes de la locomotora del CA. 


Motor Bujía similar al implicado en el accidente fabricado por Carde y Escoriaza, 1919. Archivo Histórico Provincial de Zaragoza.


A consecuencia de la colisión, descarrila el tender, arrastrando tras de sí la locomotora y cuatro de los diez coches y furgones, que andan descarrilados al menos 20 metros. El automotor se destroza el testero al chocar y arrastrado por el tender, descarriló y volcó sobre su lado derecho. El vuelco provocó a su vez el descarrilamiento y vuelco del coche remolque hacia el mismo lado, arrastrado por el enganche.


Un análisis de lo sucedido, ya que nunca se hicieron públicas las conclusiones, es que según los reglamentos de circulación de trenes, de policía de ferrocarriles y consignas que regulan el cruce en ese punto, al ser el Central de Aragón quien solicitó poder cruzar la vía de la SVT, la preferencia de paso en el cruce la tienen los trenes de CTFV. La CTFV solo debería ceder la preferencia a dicho tren correo si su tren hubiese sido de mercancías o un mixto. Por eso, la preferencia para cruzar corresponde al tren eléctrico de CTFV, y es a él a quien deben autorizar el paso las señales.

Locomotora Tipo 030. Couillet, del Central de Aragón. Fotografia:Manolo Serrano

Cabe tan solo la duda de sí esto era así, si las señales autorizaban el paso al tren de CTFV, o si cometiendo un error, autorizaban el paso al tren del Central de Aragón, aunque no tuviese la preferencia. Pero esto significaría sumar dos errores consecutivos, uno que detengan al tren de CTFV cuando es quien tiene preferencia de paso, y dos, que además el tren de CTFV se salte la señal.


La lógica impone que fue el tren del Central de Aragón, que estaba sometido a la presión del horario (circulaba 27 minutos retrasado, como hemos apuntado) quien, no teniendo preferencia y por ello teniendo las señales en indicación de parada, rebasó indebidamente la señal y atravesó el cruce justo cuando el tren eléctrico llegaba al mismo.


El tren correo venía de izquierda a derecha, según el sentido de marcha del automotor, estando la caseta de señales sita a la derecha de la vía CTFV; es por ello que el maquinista de CTFV podía haber visto al correo acercarse; pero dos masías, casa Cucaleta y casa Gresós, se hallaban construidas en diagonal entorpeciendo ambas la vista de la vía desde el tren eléctrico, aunque no nos cabe duda que debió verlo cuando éste se encontraba atravesando la acequia paralela a la vía CTFV, a unos 50 metros del cruce, y encontrándose el automotor a unos 30 metros del mismo. El tren del Central no divisó en ningún momento al tren de CTFV, ya que ni siquiera aplicó freno y mantuvo su velocidad normal en ese punto (unos 50 km/h y reduciendo). Con probabilidad, el tren CTFV frenó a unos 20 metros del cruce, alcanzando la unión del tender con el furgón a unos 25-30 km/h.

Plano de situación en la época del accidente. Pincha en la imagen para geoposicionarla.


La prensa habla en un primer momento de 20 muertos, que se fueron reduciendo hasta 5 y luego 7, según las diferentes ediciones, pero en diferentes listados se contabilizan hasta 9 muertos identificados perfectamente. Una pregunta que nos hacemos es si este automotor, del que nadie informa sobre su número, fuese el automotor 2 y que éste fuese desguazado, utilizándose sus motores en la caja del Devis 51, que se encontraba en fábrica esperando equipo eléctrico. 

La prensa local informa en un primer momento que el tren se componía de dos coches arrastrados por la locomotora eléctrica T4, y que el tren había sido alcanzado por cola, por lo que iba a Valencia. Pero se confunden, ya que la T4 era la locomotora que arrastra el tren de socorro, y que estaba detenida detrás de los dos coches siniestrados cuando llegaron los reporteros  La prensa nacional sí informa de que el tren eléctrico estaba formado por coche motor y coche remolque, que era efectivamente la composición habitual en esas fechas para los trenes regulares en la línea del Grao. 




Muertos:

-Francisco Roig Torres, conductor CTFV de 40 años, vecino de Meliana

-Consuelo Cortina Tormo, de 24 años, expendedora de CTFV, de Benimaclet

-Salvador Lanselot Urtizberea, 27 años, operario de talleres de la compañía de coches cama destinado a CTFV, de Hendaya

-Patrocinio Huerta Ruiz, de 55 años, de Landete domiciliada en Cabañal

-Vicenta Aparicio Senent, de 48 años, de Benimaclet

-José Domench Francés, de 45 años, de Alcoy

-Concepción Gurrea Daal, de 40 años, del Cabañal

-Peregrín Chuliá Aparicio, de 18 años, de Valencia

-Pedro Roger Gutiérrez, de 12 años, de Chelva


Heridos:

Alberto Puchalt Darijo, de 37 años, vecino de Sagunto, grave

Luis García Navarro, grave

Teresa Ángel Monterde, grave

Antonio Belda Lafuente, de 51 años, vecino de Valencia, grave

Filomena Pacual, de 33 años, vecina de Valencia, grave

Teresa Gómez Fenollosa, de Massanassa, grave

Remigio Zaragoza Prats, de 34 años, domiciliado en Sagunto, grave

Sagrario Vicente Vicente, de 25 años, vecina de Valencia, menos grave

Emilio Gardó Boda, de 31 años, domiciliado en Sagunto, menos grave

Vicente Esparza Mendoza, de 8 años, vecina de Carlet, menos grave

José Bosch García, de 39 años, vecino de Valencia, menos grave

Blas García Navarro, guardia de asalto de 21 años, menos grave

Pedro Peña García, de 51 años, leve

José María Andrés Cerveró, vecino de Sagunto, leve

Rosa Tortonda Castelblanch, de 45 años, vecina de Estivella, leve

Victoriano Reverter Martí, de 25 años, vecino de Puzol, leve

Teresa Marco, de 12 años, vecina de Torrente, leve

Pilar Maestre Aznar, de 6 años, leve

Pilar Aznar Edo, de 27 años, vecina de Valencia, leve

Ignacio Jimeno Alcácer, vecino de Valencia, de 40 años, leve

Rosa María Andrés Cerveró, leve


Francisco Torres ingresó en CTFV en 1926 como limpiacoches; ascendió a conductor en 1930. Era afiliado al sindicato nacional ferroviario, de la UGT. En 1934 perdió la categoría tras un accidente con víctimas, pero la recuperó en 1936, al incautar el ferrocarril el sindicato nacional ferroviario. Falleció en el acto en este accidente.



Consuelo Cortina Tormo ingresó en CTFV en 1931 como expendedora. En 1935 fue nombrada expendedora suplementaria del apeadero con circulación de Benimaclet. Falleció en este accidente. Fue auxiliada por el médico de CTFV, que acudió en el tren de socorro, quien solo pudo certificar su fallecimiento, por pérdida de sangre causada por múltiples traumatismos.



Salvador Lanselot Urtizberea era trabajador de mantenimiento de la compañía de coches camas. El comienzo de la guerra le sorprendió en Valencia, por lo que no pudo regresar a su domicilio, en Hendaya. Militarizado, como todos los trabajadores ferroviarios, se le destinó junto a otros compañeros a los ferrocarriles de CTFV, pasando a trabajar en los talleres como ayudante. Falleció en el acto en este accidente.


2 comentarios:

  1. Bon dia Paco ,com sempre bon treball de recerca.

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    1. Gracies Josep, peró el treball aquesta vegada no es meu, es de Javier Golf, un bon amic.

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